Studio Roso

Por Álvaro García (AGVCarquitectura)

Por encargo de Lance Clark, dueño de la compañía de zapatos Clark, Roso Studio realiza esta interesante instalación de luz en su sede. El encargo se compone dos partes, la primera se ubica en el corazón del patio interior del edificio de oficinas.

La tarea encomendada genera una nueva imagen, en un patio oscuro y bastante aburrido, con una longitud de 25 metros, una anchura de 7 metros y una altura de 4 plantas. Cerca de 1.500 personas pasan por estas oficinas y la zona de comedor, beneficiándose de la instalación lumínica dinámica de los dos patios.

La luz se produce a partir de una única fuente fuente, por lo que se produce un efecto visible a través de los distintos reflejos. El rayo de luz se proyecta a través de la ventana y se lanza frente a las partículas en suspensión de la instalación, de esta forma se consigue que la luz emitida no sea visible por el espectador.

Dos rayos de luz imaginaria pasan a través de los oscuros patios y se reúnen en medio de una transición donde se cruzan para volver a surgir. De esta forma se consigue reflejar una gran cantidad de luz en los patios y cualificar estos sombríos recintos.

Los rayos se materializan mediante 36 alambres verticales que se montan directamente al edificio. En cada uno de estos tensores, se anclan 7500 discos brillantes, simulando partículas de polvo. reflejando la luz y el entorno.