Bonet, Kurchan y Ferrari. En 1932, cuando todavía era estudiante en la Escuela de Arquitectura de Barcelona, Antonio Bonet Castellana entró a trabajar en el taller de Josep Lluís Sert. Cinco años después marchó con su maestro a París para colaborar en el mítico Pabellón de la República para la Exposción Universal de 1937. Aprovechando su estancia parisina, Bonet se puso en contacto con el estudio de Le Corbusier, donde conoció a los arquitectos argentinos Juan Kurchan y Jorge Ferrari-Hardoy, que le convencieron para que se trasladase a Buenos Aires, donde fundaron en 1938 el grupo Austral. Con ellos diseñó ese mismo año la butaca BKF, que ganó el Primer Premio del Salón de las Artes Decorativas.
Knoll. La firma Knoll fue fundada en Nueva York en 1937 por Hans G. Knoll –el hijo de un conocido fabricante de muebles de Stuttgart–, convirtiéndose al poco tiempo en una de la principales productoras de mobiliario moderno de los Estados Unidos, con un catálogo en el que figuraban piezas de Saarinen, Knorr, Bertoia, Platner, los Eames..., además de la mítica silla Barcelona de Mies, y, por supuesto, la BKF.
Y es que aunque esta butaca fue fabricada en un principio por Artec-Pascoe, después de la Segunda Guerra Mundial pasó a ser producida con el nobre de Butterfly por Knoll.
Y es que aunque esta butaca fue fabricada en un principio por Artec-Pascoe, después de la Segunda Guerra Mundial pasó a ser producida con el nobre de Butterfly por Knoll.
Diseño: Bonet, Kurchan y Ferrari
Año: 1938
Medidas: 93x715x750 cm
Altura del asiento: 315cm
Materiales: Estructura de acero barnizado y cuero
Fabricante: Knoll
Año: 1938
Medidas: 93x715x750 cm
Altura del asiento: 315cm
Materiales: Estructura de acero barnizado y cuero
Fabricante: Knoll