martes, 7 de enero de 2014
No es el fin del mundo
Hace un par de semanas que no escribo. No porque no quiera o no piense en escribir, sino porque a veces las cosas no son como uno las planea. Me gusta este blog y me gusta mi profesión, motivo por el que lo empecé. Pero cada vez son más las cosas que me interesan fuera de mi vocación. Lo más importante, como ha dicho Nadal recientemente: llega un día en que hay que empezar a disfrutar con lo que ocurrió.
Me crea dudas mi tenis, mi rodilla, muchas cosas. Eso no quita que han pasado nueve años de mi carrera en los que he terminado entre los dos mejores, con la excepción de 2012, que solo jugué seis meses. Si estoy bien físicamente, puedo entrenarme bien y mantengo la ilusión por jugar… no puedo pensar que se me haya olvidado jugar en unos meses. Tengo que ser positivo y pensar que las cosas me van a seguir yendo bien. Ahora, siempre con la melodía que te va por detrás de que el éxito no es para siempre. A todo el mundo le llega el momento en el que deja de tener éxito. Esa cancioncita, según pasan los años, vas escuchándola más fuerte. Hay que estar preparado para ella. Cuando me llegue, pelearé para cambiarla, pero llegará un momento en el que me tocará no ganar más. No es el fin del mundo. Daré gracias a la vida por todo lo que me ha pasado.
Y a partir de ese momento saber disfrutar de lo verdaderamente importante, esas cosas que dan la autentica felicidad: el amor de tu compañera, la sonrisa y la ilusión de tus hijos, la vida en compañía.
Luis Cercós
Santiago, Chile