La Solana, municipio situado al sudeste de la provincia de Ciudad Real, entre los municipios de Membrilla y Alhambra, contaba con un antiguo cine local, un obsoleto centro cultural donde se ubicaban la Escuela de Música y la Biblioteca Municipales, al que se adosó hace algunos años un tercer edifico destinado a Auditorio. En 2009, el Ayuntamiento asumió su transformación en un nuevo Centro Cultural moderno y polivalente (Escuela de Música, Auditorio y Sala de Exposiciones) y un Centro Tecnológico de Audiovisuales (CTA) dotado de la más alta tecnología.
Los edificios se encuentran situados en el centro de la ciudad y dentro del Área de Rehabilitación Integral, muy cerca de la Iglesia Santa Catalina, de la plaza del Ayuntamiento y en pleno casco antiguo de La Solana. Por su ubicación en esquina,con una visual del conjunto muy potente, y por su potencial como elemento revitalizador del Centro Histórico, el conjunto se convertirá con toda seguridad en un gran hito arquitectónico.
El edificio funcionará como un gran oasis cultural para la localidad, planteado con un programa muy variado y amplio, un lugar en el que difundir todo tipo de acontecimientos culturales, pero también será un lugar de encuentro y crítica ciudadana, capaz de albergar usuarios de distintas edades, condiciones sociales, y corrientes de pensamiento.
Los autores y directores del proyecto, Miguel Ángel Cabas y Luis Cercós, han buscado desde el inicio una imagen unitaria de un conjunto originalmente compuesto por varios volúmenes que funcionaban como elementos independientes y que no compartían un discurso arquitectónico común.
El Centro Cultural Polivalente y el CTA serán la nueva imagen del entretenimiento y la culturización solanera.
El Centro Cultural Polivalente albergará la Escuela de Música Municipal, con Aulas de Música y Movimiento para alumnos de 4 a 7 años, de Lenguaje Musical e Instrumento, Cabinas Individuales de Ensayo. También albergará una amplia Sala de Danza, Taller Educativo y una Ludoteca y Guardería infantil para los más pequeños, además de despachos de Administración y Dirección y Recepción.
La segunda planta al completo, con cerca de 300 m2, se destina a una gran Sala de Exposiciones.
La antiguas cubiertas de teja se han convertido en una nueva plaza elevada sobre la ciudad, con una bellas panorámicas de toda la localidad y de su horizonte.
Este nuevo espacio albergará en el futuro una pequeña cafetería, con espacios ajardinados destinados al descanso, al esparcimiento y a la relación vecinal.
El tercer edificio del conjunto, que albergaba a la antigua escuela, con pequeñas aulas distribuidas en dos plantas, se convierte en lo que ya se conoce como "El Hangar", una gran sala polivalente de 150 m2 y 6,00 metros de altura libre, con un moderno tratamiento de acondicionamiento acústico,por lo que podrá utilizarse como gran aula de ensayo de la banda municipal, como sala de conciertos de música de toda índole y sala de baile, pero también como espacio escenográfico e incluso como espacio museístico alternativo.
El proyecto de Cabas y Cercós contiene alguna sorpresa más. El conjunto, a la manera manchega, se cierra al extremo clima local y se abre al interior, controlando soleamiento y temperatura. Lo que desde el exterior puede parecer un edificio cerrado y oscuro, se muestra al interior con espacios amplios y luminosos. En una operación de "esponjamiento", de "sustracción material y adición espacial", se han eliminado tabiques y forjados, se ha abierto un patio central, y se abren nuevos recorridos exteriores que comunican este patio con los existentes y con las calles adyacentes.
De este modo, la localidad gana nuevos espacios exteriores de descanso (cubierta, patio central, el patio antesala del hangar) y el edificio toma de ellos la luz, el frescor en verano y el abrigo en invierno y el silencio.
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