Oculto tras 7 capas sucesivas de pintura de cal, la primera capa ornamental externa de una fachada en el centro histórico de Santiago de Chile se ha mantenido sobre el edificio desde su inauguración a finales del siglo XIX.
Al proceder a un decapado sencillo (simplemente con agua) se observa que en las zonas más expuestas, el revestimiento original está muy degradado. No tanto en otras zonas del edificio. Las reparaciones se realizaron durante el siglo XX con morteros inadecuados (repasos de yeso en su mayoría). Una vez sustituidos los morteros de yeso por reintegraciones adecuadas (morteros de cal), la mayor parte del revestimiento perderá su aparente ruinoso estado. La operación requiere de la participación de artesanos y restauradores, pero la antigüedad de los restos históricos y el estado general del edificio nos ha decidido por una intervención de restauración en lugar de la tradicional sustitución. El aspecto que esperamos conseguir, una vez finalizado el proceso, garantiza unos matices, texturas y ambientación general que serían imposibles de alcanzar con un revoco nuevo.
Por otro lado, sustituir por otra implicaría destruir para siempre la piel original del edificio.
Moguerza & Luis Cercós (LC-Architects)
Santiago de Chile
